A ver un aplauso, la otra mirada de nuestros artistas de la calle
“No me gusta hablar sobre moralejas o mensajes predeterminados, pero desde mi punto de vista como persona, esta obra me hizo pensar mucho en cómo nosotros vemos a nuestros artistas peruanos, principalmente a los que están en la calle, quienes desprovistos de grandes escenografías y vestuarios, se ganan la vida diariamente dejando el cuerpo y el alma en las plazas, avenidas y calles de la ciudad”, comenta Jonathan Trucios, director de la obra.
A ver un aplauso es una obra de teatro que condensa gran parte de lo que vivió nuestra sociedad peruana en la década de los años 80; verla es más que un compromiso, por su nivel poético y, principalmente, porque los personajes divierten mucho con sus historias. “Queremos hacer un llamado a todos a procurar ser empáticos. Este es el momento de estar unidos y ayudarnos entre nosotros”, explica Víctor Dávila, productor de la obra.
Esta renovada versión de A ver un aplauso llega gracias al trabajo de RECUENTO Producciones, fundado por Jonathan Trucios y Víctor Dávila, egresados de la ENSAD, quienes hace un año decidieron formar su propia productora teatral con el objetivo de experimentar con las diferentes vertientes del arte para difundir y compartir sus conocimientos, innovando en las formas en las que el arte se expresa.
“Siempre tuvimos el deseo de montar A ver un aplauso en un teatro. Nos contactamos con César de María, el dramaturgo, para comentarle nuestro interés por llevar a escena su obra. En esta oportunidad, por la coyuntura, estamos adaptando la puesta en escena a un formato virtual sin que pierda su esencia teatral y llegue a convertirse en un producto netamente audiovisual”, explica Jonathan Trucios.
A ver un aplauso cuenta con las actuaciones de Carla Arriola, Joaquín Escobar, Víctor Dávila y Santiago Suarez, quienes fueron convocados por su potencial artístico y por su forma de trabajar sobre el escenario, en la televisión y el internet. Asimismo, Jonathan Trucios comenta que dirigir actores a distancia es un gran reto, sobre todo por las dificultades técnicas que pueden presentarse, porque hay muchos juegos y recursos teatrales que no se puede realizar a través de un entorno digital. Sin embargo, junto al elenco han logrado una especial conexión.
“A pesar de no estar en un mismo espacio con nuestros espectadores, esta propuesta virtual permite que ellos se conecten y sumerjan en la historia que estamos contando. En RECUENTO Producciones vemos la situación que atraviesa el mundo como un llamado al cambio y la oportunidad perfecta para innovar”, finaliza Jonathan Trucios.
