Más de 4500 mujeres, niñas y adolescentes fueron reportadas desaparecidas entre enero y octubre

La Defensoría del Pueblo ha alertado sobre la necesidad seguir fortaleciendo el sistema de búsqueda de personas desaparecidas, y así conocer qué pasó con las 4501 mujeres, niñas y adolescentes reportadas como desaparecidas de enero a octubre del presente año. Esta situación se agrava, pues tal como se informó en el último reporte ¿Qué pasó con ellas? de octubre, en un 23 % de los casos de feminicidios, las víctimas habían sido reportadas previamente como desaparecidas.

En efecto, de enero a octubre, 1316 mujeres adultas y 3185 niñas y adolescentes fueron reportadas como desaparecidas de acuerdo a la sistematización realizada por la Defensoría del Pueblo de las notas de alerta de la página web de la Policía Nacional del Perú (PNP). Es decir, cada día, se viene reportando un promedio de casi 15 hechos de este tipo (más de uno cada dos horas, aproximadamente).

Por un lado, 348 menores de edad fueron reportados como desaparecidos en octubre. De este número, 291 notas de alerta sistematizadas fueron sobre niñas y adolescentes mujeres; es decir, el impacto por razones de género fue mayor, llegando a un 84 % del total. Si esta cifra bien ha decrecido un 14 % en octubre, territorialmente, preocupa el incremento de registros de notas de alerta en Arequipa (de 13 a 22), La Libertad (de 5 a 13), Apurímac (de 5 a 10), Puno (de 3 a 6) y Madre de Dios (de 1 a 4).

Además, en octubre, 158 mujeres adultas fueron reportadas como desaparecidas, lo que representa un 7 % más que el mes anterior. El incremento se evidenció principalmente en regiones como Lima, que subió de 45 a 60; Cusco, de 6 a 10; Junín, de 3 a 10; La Libertad, de 4 a 7, señala el reporte elaborado por la Adjuntía para los Derechos de la Mujer de la Defensoría del Pueblo.

También señala que, durante octubre, se perpetraron 14 feminicidios, con lo cual ya suman 118 en el 2020. En 28 de estos casos (un 23 %), las víctimas previamente habían sido reportadas como desaparecidas, lo que corrobora la estrecha vinculación entre la desaparición de mujeres y otras formas de violencia, como los feminicidios consumados.

No menos preocupante resulta que, en lo que va del 2020, se hayan producido 170 tentativas de feminicidio (8 de estas en octubre, cifra similar al mes pasado). Asimismo, se han perpetrado un total de 49 muertes violentas (2 en octubre), que aún siguen en investigación sin esclarecerse el contexto de la muerte.

En la quincena de octubre, en el marco del D.L.1428 y su reglamento, se implementó el Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas, adoptando nuestras sucesivas recomendaciones. No obstante, aún es preciso que se realicen algunos ajustes al sistema: en el caso del Portal de Personas Desaparecidas, es preciso que se suban las alertas de emergencia víctimas de violencia, que se coloquen fotografías en todos los casos y que se observen ítems específicos sobre la orientación sexual e identidad de género.

De la misma forma, es necesario que se registren las notas correspondientes a personas reportadas como desaparecidas en meses anteriores y que no han sido encontradas a la fecha. Además, se debe fortalecer la sección ¿Cómo denunciar?, con datos como la no obligatoriedad de esperar 24 horas para denunciar los hechos o que la PNP tiene que recibir las denuncias y cumplir con diligencias mínimas en casos en que la víctima sea una persona en situación de vulnerabilidad.

Adicionalmente, se recalca la necesidad de que se mantenga una capacitación permanente al personal policial y de los Centros Emergencia Mujer, Unidades de Protección Especial y la Línea 100. Ello debe realizarse con el objetivo de optimizar la atención y evitar que las denuncias o investigaciones se vean obstaculizadas por la persistencia de estereotipos, prejuicios de género y de la mirada adultocéntrica en el abordaje de casos que comprometen a la niñez y adolescencia.

La Defensoría del Pueblo insiste en que la desaparición de mujeres por particulares debe ser incluida en la Ley N° 30364 y en el Plan Nacional de Violencia de Género 2016-2021 como una forma de violencia de género. Esto permitirá darle mayor visibilidad al problema, especializar los servicios de atención y formular políticas públicas preventivas desde un enfoque interseccional, además de plantear mecanismos de acción en cada región de acuerdo con las particularidades del territorio.