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¿Qué son los sistemas de seguridad vial pasiva en carreteras?

La seguridad es una de las características más preponderantes al momento de adquirir un vehículo. Anualmente se invierte mucho tiempo y dinero en el desarrollo de nuevos sistemas de seguridad activa –aquellos que buscan evitar los accidentes– y pasiva –que buscan reducir al mínimo los daños que estos ocasionan–. Entre las soluciones más comunes destacan los sistemas de frenado, dirección o suspensión, así como las bolsas de aire y los cinturones de seguridad; sin embargo, ¿es la seguridad pasiva exclusiva de los automóviles? La respuesta es no: las carreteras y sus elementos marcan la diferencia entre un accidente y una tragedia. 

La negligencia de algunos conductores, que manejan a gran velocidad, en estado de ebriedad o sin prestar mucha atención al camino, así como las condiciones climáticas y el estado de conservación de las vías son factores clave que provocan muchos accidentes; pero existen elementos de la propia infraestructura que contribuyen a que las carreteras sean más seguras y es algo a lo que cada vez se presta mayor atención. La Antigua Carretera Panamericana Sur, por ejemplo, ha sido uno de los proyectos más ambiciosos en Lima en cuanto a renovación para la mejora de la seguridad y el reordenamiento de la circulación vehicular, ciclista y peatonal.

Quienes circulan por esta vía se benefician ya con importantes novedades, entre las que destacan el reemplazo de la capa asfáltica por una losa de concreto en la vía para una mayor durabilidad –considerando el tránsito de transporte pesado en algunos tramos– y una nueva señalización horizontal y vertical para mejorar la visibilidad y transitabilidad vial. Además, y esta es la principal novedad, se han instalado barreras certificadas para evitar salidas de vía y reducir la gravedad de los accidentes.

“Hasta hace poco había un desconocimiento de la norma y los estándares de seguridad internacionales. Solo se han venido usando guardavías tradicionales y muros de concreto, pero ya el Ministerio de Transportes y Comunicaciones ha adaptado la norma a la realidad peruana para que los nuevos proyectos incluyan estos elementos de seguridad, necesarios para la contención de vehículos livianos y muy pesados, como camiones de gran tonelaje”, comenta Roberto Hermoza, product manager de Infraestructura Vial de TUPEMESA.

El especialista también indica que TUPEMESA participa con varios kilómetros de sus barreras certificadas en el proyecto de renovación de la Antigua Panamericana y otros como la Carretera Longitudinal de la Sierra, Huacho-Pativilca. “Hemos participado en la carretera interoceánica; carretera Lima – Canta, autopista del sol; entre otros, a lo largo del país; con distintos modelos de barreras según las necesidades de cada proyecto”, añade.

En vías de prevención

El porcentaje de kilómetros de carretera asegurados con estas barreras en el Perú es muy pequeño, frente a la realidad de países como España e Italia, donde la mayoría de las vías son seguras. Lo más habitual en nuestras carreteras es la ausencia de protección en los laterales de las vías o en la parte central, y cuando se colocan son casi siempre guardavías convencionales o separadores viales no certificados. “Pero algo está cambiando; de hecho, el MTC ha proyectado para este 2019 un incremento del cien por cien en la instalación de estas barreras”, señala Hermoza. Esto sin duda es un acierto y más cuando se analiza el resultado de la investigación conducida por The Michelin Group según la cual, por cada dólar que se invierta en prevención se ahorran quince dólares en el futuro.

¿Cómo funcionan las barreras certificadas?

  • Se trata de un sistema de contención que canaliza la energía cinética, se deforma y hace que el vehículo se redireccione a la vía, evitando la colisión con alguna zona de peligro, por ejemplo, pilares de puentes, postes y abismos.

¿Cuáles son sus ventajas?

  • Cada tipo de barrera (borde lateral, medianera y borde puente) tiene una certificación relacionada a las pruebas realizadas a las mismas, con la que se da fe a sus niveles de contención y anchos de trabajo. Cada una está homologada con nuestro MTC.
  • Las barreras han pasado por pruebas de impacto de acuerdo a los requisitos normativos establecidos por la EN 1317 de la Comunidad Europea.
  • Poseen recubrimiento galvanizado, es decir, no requieren mayor mantenimiento ni sufrirán de oxidación.
  • La contención está garantizada sin que la barrera sea sobrepasada o traspasada.
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