2 de abril: Día Mundial de la Concienciación sobre el Autismo
Lima.- Como parte del Día Mundial de la Concienciación del Autismo, que se celebra cada 2 de abril, el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) “Dra. Adriana Rebaza Flores” Amistad Perú – Japón realizó actividades de comunicación con los pacientes y sus acompañantes para sembrar conciencia sobre esta condición neurológica, compartiendo la necesidad de conductas empáticas y de integración social.
El Trastorno del Espectro Autista (TEA), o simplemente autismo, es una condición neurológica y del desarrollo que se inicia en la infancia y que persiste toda la vida. Se habla de espectro porque hay una variabilidad entre las personas que tienen esta condición.
De acuerdo con la Dra. Lenny Mendoza, directora ejecutiva de la Dirección en Funciones Mentales del INR, existen niveles de autismo: leves (personas independientes) y severos (asociados a discapacidad intelectual).
“Estas personas se caracterizan por expresar conductas repetitivas y mostrar intereses restringidos; por ejemplo, el aleteo de manos o mirar insistentemente el movimiento del mismo objeto. También es frecuente su dificultad en la interacción social, evitan mirar a los ojos y jugar con otros niños”, indicó la especialista.
Los niños con autismo requieren grados variables de soporte; este punto marca la diferencia para resultados en su funcionamiento en la sociedad. El núcleo familiar y la sociedad cumplen un rol muy importante al ser el primer soporte.
“El hecho de que un niño tenga autismo no significa que no pueda ir a la escuela. El colegio es un derecho fundamental y el niño debe tener la oportunidad de ir a la escuela y participar en la sociedad”, mencionó la Dra. Mahali Béjar, jefa del Departamento de Desarrollo Psicomotor del INR.
Rehabilitación
El Instituto Nacional de Rehabilitación, a través de un equipo multidisciplinario, brinda rehabilitación a los pacientes con autismo, la cual consiste en terapia ocupacional y de psicología a fin de mejorar las respuestas adaptativas, la flexibilidad en la conducta y comportamiento.
“Debido a las frecuentes alteraciones en el desarrollo del habla, la terapia de lenguaje suele estar presente. También se brinda terapia psicopedagógica en la que descubriremos y potenciaremos sus fortalezas, dependiendo del nivel de la condición autista. Por otro lado, las terapias físicas de grupo y especialmente de deportes, brindan al niño la oportunidad de ir socializando en situaciones conocidas”, comentó Bejár.
Estas intervenciones se realizan en los cuatro departamentos médicos de la Dirección en Funciones Mentales: Departamento de Desarrollo Psicomotor, Departamento de Deficiencias Intelectuales y de Adaptación Social, Departamento de Comunicación y Departamento de Aprendizaje.
