En el marco de la Semana Global del Emprendimiento, el jueves 21 de noviembre se conmemora el Día de la Empresa Social. Este día surge para reconocer e impulsar emprendimientos que, empleando la fuerza del mercado, contribuyen a resolver desafíos sociales, ambientales y culturales como los priorizados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
Según el “Segundo reporte del estado del emprendimiento social y ambiental en el Perú”, publicado en octubre por Kunan y la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), el 37% de los negocios sociales del país se enfocan en el “ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico” a través de su actividad. Le siguen, en orden de importancia, el “ODS 12: Producción y consumo responsable” (28 %), el “ODS 3: Salud y bienestar” (28 %), el “ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles” (24 %), y el “ODS 10: Reducción de las desigualdades” (23 %).
Durante los últimos años, las empresas sociales peruanas han realizado labores como la apertura de canales digitales, rediseño de productos para cumplir con medidas de seguridad, y trabajo con nuevos públicos beneficiarios. El 42% de los emprendimientos de impacto del Perú opera a escala regional, abarcando diversas regiones del Perú, como Lima, La Libertad, Cusco, Junín, Cajamarca, Puno, Arequipa, Ucayali y Tacna. Mientras que el 37% lo hace a escala nacional.
Juan José Román, gerente de proyectos de Aprenda -empresa peruana especializada en capacitación y desarrollo de los empresarios de la micro y pequeña empresa- comenta: “El Día de la Empresa Social es una oportunidad para renovar nuestro compromiso con los emprendedores de impacto, el cual asumimos desde 2013 al organizar ruedas de negocios para conectar comercialmente a los pequeños negocios sociales con las grandes empresas. Desde 2020, además, somos la empresa operadora de ‘Invirtiendo Futuros’, iniciativa de sostenibilidad de Credicorp Capital, pionera en brindar asesoría financiera especializada gratuita a las empresas sociales de Perú, Chile, Colombia y Panamá”.
En esa línea, Aprenda comparte 5 rubros de negocios sociales que ya se están implementando en otros países de América Latina y se pueden explorar para generar un alto impacto en Perú:
- Reciclaje y reutilización de residuos sólidos: Empresas que se dedican a la recolección, clasificación y reciclaje de materiales como plástico, vidrio, papel y metal, para darles una segunda vida y reducir la cantidad de desechos que llegan a los vertederos. Algunas incluso fabrican nuevos productos a partir de estos materiales reciclados, dándoles una nueva vida útil.
- Agricultura sostenible y seguridad alimentaria: Emprendimientos que trabajan con pequeños agricultores, especialmente en zonas rurales, para implementar prácticas agrícolas más sostenibles, diversificar los cultivos y mejorar la nutrición y los ingresos de las familias. También desarrollan cadenas de valor cortas que acercan los productos a los consumidores.
- Energías renovables y eficiencia energética: Empresas que ofrecen soluciones de energía limpia, como paneles solares o sistemas de biogás, para comunidades que carecen de acceso a la red eléctrica tradicional. Otras brindan servicios de auditoría y mejoras para aumentar la eficiencia energética en hogares, escuelas y negocios.
- Educación y capacitación para el empleo: Iniciativas que brindan oportunidades de formación y desarrollo de habilidades, especialmente en sectores con alta demanda laboral, para mejorar las perspectivas de empleo de jóvenes, mujeres y otros grupos vulnerables.
- Salud y bienestar comunitario: Empresas que ofrecen servicios de atención médica asequibles y de calidad, ya sea a través de clínicas móviles, telemedicina o la construcción de infraestructura, con un enfoque en poblaciones marginadas. También desarrollan productos y soluciones para mejorar el bienestar físico y mental.
