En los últimos años, las redes sociales se han consolidado como el espacio predilecto de los creadores de contenido en el Perú. Según el informe “Estudio de Influencers en Perú 2023”, el 72% de los influencers nacionales tiene mayor actividad en TikTok, mientras que un 59% prefiere Instagram, lo que ha generado nuevas oportunidades para la innovación en diversos sectores, incluyendo el educativo.
Este crecimiento de las redes sociales, particularmente entre los jóvenes, ha llevado a diversas instituciones educativas a replantear sus estrategias de enseñanza y comunicación.
Al respecto, Jorge Muñoz, gerente de marketing y comercio de IDAT, mencionó: “Integrar plataformas como TikTok e Instagram en el ámbito educativo no solo atrae a los estudiantes, sino que mejora la retención de conocimientos mediante contenido audiovisual dinámico y fácil de entender”.
El estudio revela que TikTok, con sus videos cortos y dinámicos, ha capturado la atención de un público juvenil deseoso de consumir contenido rápido y atractivo. Le siguen Instagram, conocida por sus funciones de reels y stories, y YouTube, que continúa siendo un referente en la creación de contenido audiovisual de larga duración. Este panorama muestra la clara preferencia de los jóvenes por formatos audiovisuales y plataformas que les permitan interactuar en tiempo real.
En este contexto, Muñoz señaló: “La educación no puede quedarse atrás. Los estudiantes de hoy esperan aprender de manera visual e interactiva. Herramientas como los reels de Instagram o los vídeos educativos en TikTok pueden transformar el proceso de enseñanza, haciéndolo más accesible y atractivo”.
Además, destacó la importancia de adaptar los contenidos académicos a estos formatos: “Es esencial que los educadores se capaciten en la creación de contenido digital, para que los estudiantes se sientan conectados con el aprendizaje de una manera más natural y cotidiana”.
La consolidación de TikTok e Instagram como las principales plataformas de contenido en Perú plantea grandes retos y oportunidades para la educación superior. La implementación de estas herramientas en el aula podría no solo aumentar el interés de los estudiantes, sino también prepararlos mejor para enfrentar las demandas de un mercado laboral cada vez más digitalizado.
