Lima.- Las decisiones y los comportamientos que los jóvenes adopten hoy pueden tener un impacto significativo en su salud física y mental en el futuro, por lo que es ideal que en dicha etapa se implementen hábitos saludables, no solo para prevenir enfermedades crónicas en la adultez, sino también para asegurar un desarrollo óptimo que garantice un buen rendimiento académico y proporcione bienestar emocional.
“Las personas que suelen establecer sólidamente hábitos saludables desde la juventud tienden a mantener ese estilo de vida a largo plazo, debido a que adoptan diversas rutinas que forman parte de su día a día. Cuidar de la salud desde jóvenes también involucra realizarse chequeos preventivos, idealmente cada año, como el examen físico general. Por último, es importante cumplir con el plan de vacunación para prevenir enfermedades infecciosas”, afirma el Dr. Daniel Angulo, Director del programa de Medicina Humana de la Universidad Norbert Wiener.
Teniendo en cuenta ello y en torno al Día Internacional de la Juventud (12-agosto), el especialista detalla cinco hábitos claves para construir una vida saludable desde jóvenes.
- Construye una alimentación equilibrada: Rica en frutas, verduras, granos integrales, proteínas, y grasas saludables. Asimismo, evita los alimentos procesados, las bebidas azucaradas y las grasas saturadas. Esto puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas como obesidad, diabetes y enfermedades cardíacas.
- Realiza actividad física regular: Al menos 60 minutos cada día. Esto puede incluir practicar deportes, tomar clases de ejercicio o simplemente caminar con regularidad. La actividad física regular fortalecerá tu sistema cardiovascular, músculos y huesos, así como te brindará beneficios para tu salud mental.
- Prioriza un sueño de calidad: El sueño adecuado es esencial para el desarrollo físico y mental. Por lo que es ideal que descanses entre 8 a 10 horas por noche. Un buen sueño ayuda a mejorar la concentración, el rendimiento académico y el estado de ánimo.
- Cultiva el bienestar mental: Practica técnicas de manejo del estrés, tales como la meditación o el yoga, y asegúrate de tener tiempo para actividades recreativas y de ocio, pues es crucial para mantener una buena salud mental. Además, es importante buscar apoyo cuando se necesite, ya sea hablando con amigos, familiares o profesionales de la salud.
- Evita sustancias nocivas: Evita el consumo de tabaco, alcohol y otras drogas para prevenir una serie de problemas de salud, incluyendo enfermedades respiratorias, hepáticas y mentales. Adopta un estilo de vida libre de sustancias nociva para asegurar un futuro saludable.