Durante los últimos años, el tratamiento para el cáncer de mama ha evolucionado. Esto es posible gracias a los avances en la medicina, que a través del uso de equipos tecnológicos viene innovando en el tratamiento de esta neoplasia, logrando que las intervenciones sean menos invasivas y más eficaces.
Como es el caso de la radioterapia, que gracias a su uso disminuye en casi dos tercios la probabilidad de que una paciente vuelva a presentar cáncer de mama y se logre una curación completa.
En el Perú el cáncer de mama es una de las enfermedades con mayor presencia no solo en el número de casos, sino de fallecimientos. Así lo confirman las estadísticas de Globocan al 2022. Según este estudio mundial, el Perú ha registrado 7. 797 nuevos casos y 1.951 casos de muertes durante este período. Datos que evidencian la necesidad de mejorar los procedimientos de diagnósticos oportunos; así como tratamientos apoyados en la tecnología para reducir estas brechas de atención en nuestro país.
El Dr. Ariel Farias, Médico Radioncólogo de FALP, explica que, gracias a las terapias sistémicas, es posible disminuir la probabilidad de que un cáncer se pueda transformar en uno metastásico. “Gracias a la radioterapia es posible entregar radiación más precisa y con menos sesiones. Esto se debe a que los equipos actuales permiten realizar un escaneo previo a cada sesión para que la radiación sea más segura y focalizada”.
Tratamiento coste efectivo: Radioterapia mejora las tasas de supervivencia
Para casos de cáncer de mama en etapa uno, dos o tres, la radioterapia puede irradiar la mama con o sin el compromiso de ganglios. En casos de etapas más avanzadas, como la etapa cuatro, donde se presentan metástasis, se utiliza la radiocirugía, procedimiento que no requiere bisturí y consiste en dar altas dosis de radiación en una, tres o cinco sesiones.
“Actualmente en FALP contamos con un acelerador lineal que nos permite tomar una imagen previa antes del tratamiento para irradiar lo necesario, también contamos con máquinas de última tecnología, como Radixact, que permite irradiar la mama y los ganglios sin comprometer la piel. Otras máquinas modernas que utilizamos es el tratamiento de IMRT, que disminuye mucho la dosis de radiación que le llega a los órganos normales; de esta forma uno puede irradiar menos los tejidos sanos y por lo tanto, disminuir los efectos adversos durante el tratamiento “, agrega Farias.
Durante su participación en el “Congreso Interdisciplinario de Radioterapia”, organizado por la Sociedad de Radioterapia del Perú, el especialista comentó que a nivel de región aún estamos en camino. Sin embargo, países como Chile, ya están utilizando estas tecnologías para lograr que más personas diagnosticadas con cáncer puedan recibir una atención de calidad con mayores probabilidades de curación.
Por su parte, el Dr. Pablo González, subdirector Médico de Radioterapia Oncológica de FALP, destacó que la radioterapia sirve para curar el tumor y aliviar los síntomas, mejorando la calidad de vida del paciente: “es un tratamiento costo efectivo, ya que, a pesar del enorme impacto, representa sólo aproximadamente el 7% de los gastos. Cuando uno trata y cura a un paciente precozmente con radioterapia va a poder reemplazar a la cirugía y evitar utilizar medicaciones complejas y caras”.