Se acerca Halloween y como cada año, niños y niñas esperan la fecha para transformarse en sus personajes favoritos y recolectar la mayor cantidad de dulces para disfrutarlos durante el recorrido y en los días posteriores. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta divertida tradición puede representar un riesgo para la salud dental debido a la alta ingesta de golosinas.
“El consumo de grandes cantidades de dulces lleva a la producción de ácidos que afectan la superficie del esmalte dental, aumentando el riesgo de caries. Este riesgo es mayor si los dulces permanecen adheridos a los dientes durante largos períodos, debido que el pH de la saliva cae rápidamente a niveles críticos de acidez (aproximadamente en 5 minutos) y tarda entre 20 a 40 minutos en volver a su nivel natural”, afirma Enna Garavito Chang, coordinadora de la especialidad de Odontopediatría de la Universidad Norbert Wiener.
Teniendo en cuenta ello y en torno a la noche de Halloween, la especialista brinda cinco recomendaciones para el cuidado de la salud dental infantil:
Promueve el consumo moderado de dulces: Los padres deben enseñar a los niños a disfrutar de los dulces con moderación, estableciendo horarios específicos para su consumo y evitando que los ingieran durante períodos prolongados. Es importante recordar que en tan solo cinco minutos después de consumir dulces, el pH bucal puede descender a niveles críticos que provocan la desmineralización del esmalte dental.
Evita los dulces más dañinos: No todos los dulces afectan los dientes de la misma manera. Los caramelos pegajosos como toffees, frunas y gominolas son particularmente perjudiciales, debido que permanecen más tiempo en contacto con los dientes y son más difíciles de eliminar. Opta por alternativas que se disuelvan rápidamente.
Hidrátalos constantemente. Durante la celebración, es esencial que los niños beban agua frecuentemente y no jugos ni bebidas azucaradas. El agua ayuda a eliminar residuos de azúcar y restaurar el pH bucal, reduciendo el riesgo de caries.
Ofréceles alternativas saludables: Junto con los dulces, podemos ofrecerles opciones de refrigerios más saludables, como yogur o frutas. Esto equilibrará el consumo de azúcar y proporcionará nutrientes para su salud dental.
Mantén una higiene oral constante: Es fundamental que los niños se cepillen los dientes lo más pronto posible después de consumir dulces, utilizando una pasta dental con flúor. Este mineral es esencial para fortalecer su esmalte dental y prevenir la formación de caries. El uso de hilo dental y enjuague bucal complementará su rutina de higiene.
«La caries dental continúa siendo una de las enfermedades más prevalentes a nivel mundial. Halloween es la oportunidad perfecta para enseñar a nuestros niños y niñas que pueden disfrutar de las festividades de manera responsable, cuidando su salud bucal», afirma la especialista de la Universidad Norbert Wiener.
