Carmen Rosa orienta a las familias para una infancia saludable y feliz
Lima. – La fortaleza es una virtud que se evidencia en situaciones de dolor; enfrentarlas y salir adelante, es el reto. Carmen Rosa, cuyo nombre es sinónimo de valentía, ha sabido hacerle frente a uno de los momentos más tristes de la vida, el fallecimiento de su pequeño Juan Donadony.
“En cada hogar, hay diferentes casos. Son felices, otro hogar, como dice la canción, sonríe como el payaso pero al final tienen algo”, comenta Carmen Rosa Pérez, quien recuerda a su hijo como un ángel que los cuida desde el cielo.
Desde hace 12 años, es actora comunal en el rol de facilitadora del Servicio de Acompañamiento a Familias (SAF), del Comité de Gestión “Valle de las Taras”, del Programa Nacional Cuna Más del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), en el centro poblado de Orcasitas, distrito ayacuchano de Pacaycasa,
“Cuna Más llegó a Pasaycassa, convocaban para facilitadora y fuimos 18 participantes de las cuales yo ocupé el primer puesto con 81 puntos”, recuerda Carmen Rosa, quien promueve el Desarrollo Infantil Temprano y refuerza las prácticas de cuidado y crianza saludable en las familias de su comunidad.
Para esta voluntaria es importante compartir conocimientos y experiencias de manera permanente, respetando siempre los saberes de la comunidad. “Mi misión en la vida es seguir adelante, aconsejando a mis mamás a que no se rindan y que siempre estén pendientes de la familia, porque la familia es la fortaleza”, refiere.
Carmen Rosa está agradecida con las familias de Cuna Más porque día a día fortalecen su convicción de seguir apoyando a las niñas y niños que la llenan de amor y paz con cada sonrisa. “Entendí que la única forma de cambiar un sufrimiento, un dolor o una pena, es a través de la comprensión, porque la transformé en un aprendizaje de vida. Y mis familias usuarias, la familia Cuna Más me ha enseñado tanto que sigo de pie y sigo adelante”, finaliza.
En Ayacucho, el Programa Nacional Cuna Más atiende a 8,812 familias usuarias mediante el Servicio de Acompañamiento a Familias y a 3,077 niñas y niños menores de 36 meses de edad en el Servicio de Cuidado Diurno (SCD).
