COVID-19: ¿cómo superar el duelo por una pérdida?

Derivado de la pandemia, el duelo por la partida de seres queridos se ha hecho extensivo también a la pérdida del trabajo, a tener que cambiar de planes para el futuro y a no poder salir al colegio, oficina o lugares que antes se frecuentaban. Considerado el duelo como cualquier pérdida que cause dolor, esta condición ha dejado importantes huellas en la salud mental de la población en el Perú.

Cifras de la Universidad Johns Hopkins revelan que, llegado el mes de julio, el mundo superó 4 millones de muertes registradas a causa de COVID-19, mientras que Perú destaca entre los países con mayor número de muertes en el mundo después de: Estados Unidos, Brasil, India y México.

“Los problemas de salud mental no solo han afectado a los contagiados, sino también al resto de la población. Hay muchos niños, jóvenes y adultos que sufren estrés, ansiedad o depresión, pero no lo manifiestan, son algo así como portadores asintomáticos”, menciona Santiago Paredes, profesional especialista en Neurociencias del Policlínico Peruano Japonés.

“De manera frecuente, quienes han sufrido el fallecimiento de uno o más familiares, se sienten culpables y piensan: “Si lo hubiera llevado a tiempo al hospital, si mejor lo hubiera tratado en casa, si hubiera conseguido oxígeno”, entre otros. En estos casos, los afectados necesitan acompañamiento, distracción y atención para superar el duelo en que se encuentran, evitando que este se convierta en un cuadro de depresión”, destaca Paredes.

Algunas recomendaciones para contrarrestar estas consecuencias psicológicas ocasionadas por el duelo por una pérdida son: mantener una terapia ocupacional y orden de actividades que nos permita dar sentido a la vida, realizar algún tipo de actividad física constante en espacios abiertos, así como realizar distintas actividades con las formas tradicionales de nuestra cultura, aunque con las medidas de prevención necesarias. Si pese a estas indicaciones una persona continúa deprimida, es necesario acudir con un profesional de salud mental –psicólogo o psiquiatra-.

“Como individuos tenemos una cultura de alto nivel de afinidad emocional, de integración familiar y de vínculos sociales. En este contexto, la práctica de las 3C puede ayudar a que las personas retomen algunas actividades cotidianas. Si evitan espacios cerrados, lugares concurridos y el contacto cercano, tal como lo señala este modelo, podrían volver a salir y socializar con mayor libertad, sin temor y así mejorar su salud emocional”, puntualiza el especialista.

Es por ello que la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y la Asociación Peruano Japonesa (APJ) promueven la campaña Cuídate Con Cuidado, que difunde la práctica de las 3C, como una manera sencilla y eficaz de hacer frente a esta enfermedad.

Como consecuencia del COVID-19 muchas personas atraviesan por un duelo. Para algunos, es no volver a ver a seres queridos; para otros, la pérdida de capacidad adquisitiva y su estilo de vida, mientras que para la mayoría fue la pérdida de contacto físico y las relaciones interpersonales. En ese sentido, la práctica de las 3C permite ir recuperando la confianza y establecer nuevas prácticas seguras para evitar los contagios.

Para conocer más sobre la campaña, visita y síguenos en www.cuidateconcuidado.com y en las redes sociales de JICA y la APJ, donde podrás recibir información y compartir nuestro mensaje que salva vidas: #CuídateConCuidado #Practicalas3C y #Las3Csalvanvidas.