Pilar Conde, psicóloga de Clínicas: la risa es uno de los vínculos humanos más poderosos
España.- Días después de que tuviésemos conocimiento de la muerte de Mathew Perry, la noticia sigue siendo tendencia en redes sociales y ocupando espacios destacados en los medios de comunicación. No terminamos de despedirnos de la estrella, pero, sobre todo, no finaliza el homenaje a Chandler Bing, el personaje.
“Para mí Friends’ es más que una serie… Y ellos seis, más que unos personajes… Es como si se fuese alguien a quien conozco. Gracias, Matthew Perry. Gracias, Chandler Bing. Siempre vas a ser nuestra media langosta”.
Este tweet de la actriz Elena Rivera ejemplifica a la perfección lo que espectadores y seguidores de Friends están sintiendo en el adiós colectivo a este actor de 54 años, al que otros tuiteros anónimos le desearían “poder ver cuánta gente le quería y apreciaba”.
Son sólo dos ejemplos en un mar de condolencias y alabanzas, que, según explica la psicóloga de Clínicas Origen, Pilar Conde, tiene que ver con “el vínculo que los actores crean con la audiencia cuando conectan con nuestras emociones, cuando impactan en nuestra vida de una u otra manera”. A ello se une, explica la experta, lo querido del personaje, que hizo reír y acompañó a toda una generación de jóvenes en la transición a la edad adulta.
El poderoso vínculo de la risa
Así, a la identificación que se produce a través de las situaciones y el carácter — Chandler es el trabajador típico de oficina, el enamorado con miedo al compromiso y el amigo leal al que todos pueden recurrir— se une el potente vínculo que crea el humor. Reírnos y hacer reír no sólo potencia la empatía y empuja las relaciones sociales, sino que nos sitúa frente al espejo y nos ayuda a reírnos de nosotros mismos, lo que mejora nuestro autoconocimiento y nuestra autoestima.
Diez años en emisión episódica semanal, una pauta de consumo de series muy distinta al “atracón televisivo” actual han potenciado la poderosa memoria sentimental, la que nos vincula a experiencias a lo largo del tiempo.
Amigos, amantes y aquello tan terrible
Pero las muestras de cariño hacia Mathew Perry no finalizan en la celebración de sus mejores momentos con su primero novia y después esposa Mónica o con su gran amigo Joey en Friends, sino que se extienden hacia los episodios problemáticos de su vida. Según su propio testimonio, publicado en el libro Amigos, amantes y Aquello tan terrible, el intérprete ha pasado gran parte de su vida luchando contra las adicciones a sustancias tóxicas. Él mimo ha relatado que llegó a tomar más de cincuenta pastillas de Vicodin (un analgésico) al día y que fracasó en diversas terapias de rehabilitación.
La confesión abierta y honesta de esta batalla fue apoyada en su momento, por su valentía y por el valor que el testimonio de Perry tiene para los más jóvenes, que hoy pueden ver Friends en las plataformas digitales, y lo ha vuelto a ser en su inesperada muerte.
Fans, seguidores y simplemente espectadores ocasionales lloran al actor y al personaje y se despiden de él en las redes, una posibilidad nueva que la tecnología trae a la elaboración del duelo. Un nuevo ritual conjunto, explican desde Origen, con el que despedirnos y homenajear a aquellos personajes públicos queridos. Y Mathew/Chandler lo era.
