Urge redistribución de tareas del hogar ante aumento de esta carga en perjuicio de mujeres
Lima.- La Defensoría del Pueblo recalcó, una vez más, que es imprescindible la redistribución del trabajo doméstico no remunerado (TDNR) entre todos los integrantes del hogar, ya que estas actividades seguirían recayendo inequitativamente en las mujeres en la actual emergencia sanitaria. Asimismo, es necesario un mayor compromiso por parte de los hombres en las tareas del hogar, de tal forma que los hijos e hijas se eduquen en igualdad.
Cabe recordar que, en la actualidad, las mujeres dedican un promedio de 39 horas a estas labores, mientras que los hombres 16 horas; es decir, ellas utilizan más del doble del tiempo que los varones. Esta situación diferenciada las afecta en todo su ciclo de vida, ya que, desde los 12 años, duplican la participación de los hombres en el TDNR, llegando a triplicarla entre los 30-39 años.
En el actual estado de emergencia, casi sin actividades productivas para el mercado laboral, con los colegios cerrados y educación a distancia, este problema se estaría ahondando, pues aumentaría la carga de TDNR de las mujeres en el aseo, compra de víveres y ropa, limpieza del hogar, preparación de alimentos, acompañamiento a hijas e hijos en clases virtuales o por TV, etc.
Asimismo, recae sobre ellas el cuidado de los menores, personas con discapacidad y población adulta mayor, lo cual limita su acceso a la educación y al desarrollo profesional, además de generar brechas salariales y de verse reducida su participación laboral en el mercado. Incluso, una vez terminada la cuarentena, la carga de cuidados de las y los enfermos seguiría en manos de ellas, lo cual comprometería su continuidad laboral y educativa.
Por ello, desde la Defensoría del Pueblo, se hace un llamado a la población a que se redistribuyan equitativamente las labores desarrolladas en el hogar y a que los varones asuman un mayor compromiso en ello. De esta manera, la familia proporcionará un ejemplo a los hijos e hijas y permitirá su educación en igualdad de oportunidades y roles que perdurará, incluso después de terminada la situación de emergencia.
De la misma forma, hacemos un llamado a las autoridades a seguir transversalizando el enfoque de género en las estrategias educativas, como Aprendo en Casa. Además, se debe reforzar la atención de la violencia que se puede presentar por la distribución inequitativa de las actividades en el hogar.
