Siete consejos que revitalizarán tus encuentros sexuales

Una vida sexual saludable es primordial para mantener el bienestar físico y emocional de las personas. Sin embargo, con el paso del tiempo, ciertos factores alteran la calidad de las relaciones íntimas. Desde variaciones en el metabolismo, propios de la edad, problemas médicos, hábitos poco sanos, hasta afecciones derivadas del estrés y el estado de ánimo.
De acuerdo con el Dr. Daniel Galarreta del Centro Médico Urozen, tanto hombres como mujeres experimentan cambios que modifican su capacidad para disfrutar de una sexualidad completa. Los desequilibrios hormonales, las dificultades con la erección, la disminución del deseo o la falta de lubricación son las incidencias que producen mayor preocupación.
Con el fin de mejorar la calidad de los encuentros íntimos es fundamental considerar diversas estrategias que aborden los aspectos fisiológicos y emocionales. En este sentido, el especialista ofrece siete recomendaciones para lograr una intimidad más satisfactoria:
Cuide su dieta. Incluir alimentos ricos en potasio, magnesio y nutrientes esenciales, zinc y antioxidantes, como frutos secos, pescados azules, palta o frutos rojos, beneficia la función sexual en ambos géneros, ya que juegan un papel fundamental en la producción de hormonas y en el mantenimiento de una buena circulación. Asimismo, limite la ingesta excesiva de alcohol y suprima el consumo de tabaco.
Practique ejercicios con regularidad. La actividad física favorece la circulación sanguínea y promueve una buena salud cardiovascular, lo que es esencial para una función sexual óptima. El entrenamiento también libera endorfinas, que aumentan la libido e incrementan la respuesta en la intimidad.
Mantenga un peso corporal saludable. El sobrepeso y la obesidad afectan negativamente el deseo y el desempeño sexual en ambos géneros. Conservar un peso adecuado a través de una dieta equilibrada elevará la calidad de sus encuentros amorosos.
Controle sus emociones. El estrés y la ansiedad crónicos impactan sobre la libido y la respuesta sexual. Practicar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o la respiración profunda puede reducir el estrés y mejorar la experiencia íntima. Si los problemas continúan no dude en visitar a un profesional.
Considere el reemplazo hormonal. En casos donde las fluctuaciones hormonales afectan negativamente la vida sexual, la terapia de reemplazo hormonal, monitoreada por un especialista, puede ayudar a equilibrarlas.
Refuerce la calidad de la erección. Ya sea que presenten problemas de disfunción eréctil o si siente que su potencia ha disminuido, existen tratamientos, como las ondas de choque, las bombas de vacío, los fármacos orales e incluso, ciertas intervenciones quirúrgicas que lo ayudarán a recuperar el vigor. Por supuesto, siempre bajo supervisión médica.
Vigile la salud sexual en su relación. Si tiene una pareja, es necesario que ambos se involucren en el cuidado mutuo de su intimidad. El diálogo abierto y honesto sobre sus inquietudes, deseos y preferencias contribuyen a alcanzar una sexualidad plena.
Mejorar la calidad de las relaciones íntimas implica considerar diferentes aspectos, desde la nutrición adecuada y el ejercicio regular hasta la comunicación transparente y la preservación de su salud corporal y mental. Recuerde que el plano sexual es un componente crucial del bienestar general y parte fundamental de una relación amorosa saludable.